Ahora llega el momento crucial: cómo bañar el bizcocho. Si hemos logrado la cobertura de chocolate con la justa densidad, todo resultará bastante fácil.Veamos los pasos: Colocamos el bizcocho encima de una rejilla que esté a una cierta distancia de la fuente sobre la que estamos trabajando, ya que hay que dejarle espacio al chocolate para que cuele.